Discos de lactancia de cuento (y una pequeña explicación)

Discos de lactancia para S. y para E.

(Seguid leyendo si os interesa un poco el modo de uso)

Entre las muchas cosas que me gusta coser, se encuentran los discos de lactancia (a estas alturas, ya lo sabréis, ¿no? Soy muy defensora de la lactancia materna y de la higiene en tela en lugar de utilizar cosas de usar y tirar).
Me gusta tenerlos todos amontonados,como si fueran tortitas:

 

 Dos pares de cada modelo (menos de Bob Esponja) aunque en la foto sólo sale uno de cada:
- dos de bosque
- dos de los tres cerditos
- dos de Hansel y Gretel
- y un par de Bob Esponja

 Me encanta verlos todos juntos.
Los discos de tela son la mejor alternativa a los desechables (al menos para mí). En mi caso, usaba tres al día, dependiendo siempre de la salida de leche: me gustaba cambiarlos tres veces al día, aunque a veces no era necesario, pero como tenía/tengo varios, y es lavar y usar, pues no me suponía problema cambiarlos a menudo.
Para lavarlos no me complico: lavadora con la ropa y secadora o tendedero. Cuando me los quitaba, los metía en el cubo de la ropa sucia y los lavaba como lavo nuestra ropa normal. Lo único que hay que tener en cuenta es que yo no uso suavizante, y que lavo con jabón casero (jabón en escamas disuelto en agua, lo más simple pero para nosotros muy efectivos). Para lavar este tipo de cosas es mejor no utilizar suavizante, porque los impermeabiliza y entonces dejan de absorber.

He hablado en pasado sobre el uso de los discos de lactancia porque con U. no los he tenido que usar (será que no les dan tiempo, son dos en tándem) y eso que tengo muchos de los que me cosí con A. (y alguno que otro que cosí en el embarazo de U.). Pero bueno... no me quejo de no usarlos, seguro que les acabo dando uso como toallitas desmaquillantes, jeje.