miércoles, 27 de diciembre de 2017

Toallitas de tela

Llevo tiempo queriendo hablaros de las toallitas de tela en lugar de las desechables. Lo publico hoy miércoles por dos motivos: porque no me ha dado tiempo a terminar la tuca que tengo a medias, y porque aunque no sean para mí directamente, sí que las uso yo, así que son una costura que he hecho para mi. 
Las toallitas desechables no me gustan demasiado (aunque las uso, y siempre llevo un paquete en el bolso) así que con R. empecé a investigar sobre toallitas de tela. Algo que limpia tan bien cualquier mancha, sea del tipo que sea (el suelo lo dejan impecable) no sé hasta que punto lo quiero en el culo de mi bebé. Así que procuro usar toallitas de tela.
Estas son de la última remesa, y también es un buen modo de deshacernos de los retales:


¿No son súper monas?
Por la "cara bonita" llevan algodón tipo patchwork
 Y por detrás llevan polar, porque el polar se lleva fatal con la caca XD
 También tengo estas, de franela (estoy enamorada de esta franela)

 Para usarlas, tengo este vaporizador con "la mezcla" (hay mil mezclas, hasta pastillas que se disuelven en agua y te ahorras hacer tú la mezcla... pero yo uso la misma hace tiempo , y es la que mejor me/nos va):
- Aceite de almendras dulces (algo menos de la mitad del bote)
- Gel de aloe vera (muy poco)
- Agua (del grifo, no me complico)
Para usarlas, muevo el vaporizador, para integrar el aceite con el agua, y vaporizo en la tela polar de la toallita. Limpio lo que hay que limpiar, y a lavar.
 En casa las tengo en esta cesta, encima de la cómoda y junto al cambiador.
Es muy fácil usarlas, os animo a ello (pronto os quiero enseñar toallitas desmaquillantes lavables, pero sigo testeándolas)

Enlazo en MiMi, de Malas Costureras, porque hoy es MiMiércoles. 

lunes, 25 de diciembre de 2017

Muñeco de nieve, Navidad, muñeco de nieve... (Disfraz)


Erase un muñequito de nieve que conmigo eramos nueve los amigos de mi barrio 

al principio era muy pequeñito 
pero luego luego se creció y creció 
con una panzota bien grandota de nariz y una pelota corbatín y un gran sombrero 
era mi muñequito de hielo 
que en diciembre todo se formó 



muñeco de nieve navidad 
muñeco de nieve navidad 
muñeco de nieve navidad 
muñeco de nieve navidad navidad 



Pues sí, el disfraz para la fiesta navidad del cole del peque (o de mi mayor, que ya se me hace raro llamarlo peque) ha sido muñeco de nieve.
- Mamá, en el cole tengo que ir de muñeco de nieve
- ¿Y eso como es?
- Pues de blanco, mami, de blanco.

Algo tan fácil y, a la vez, tan complicado para mi, que no tengo ni una sola prenda blanca en casa(bueno, sí, los leggins y la camisa del disfraz de Elvis, pero eso era muy de verano para ponérselo en diciembre)
Al final, decidí hacer un pedido a Cal Joan (ya es tradición, el año pasado también le compré a ella la tela -blanca- para el disfraz de Navidad del cole, que iban de cocineros) y coserle una sudadera y unos pantalones de chándal.
¿No iba precioso de Muñeco de Nieve?


Para la sudadera, el modelo Heather de la ottobre 4/2014. 

Para los pantalones, modelo Star Man de la misma revista, un pantalón de chándal que se cose bastante rápido y me ha gustado tanto como le quedan que, mientras estoy escribiendo esto, tengo otros a medias (también con tela de sudadera calentita)


Completa el disfraz un gorro y una bufanda, para que el muñeco de nieve no pase frío.
La bufanda la hice siguiendo el método tradicional, con dos agujas, pero para el gorro quise estrenarme con el telar circular

Después de hacer una prueba con lana naranja (que al final ha quedado para el peque) me puse "en serio" y este es el resultado



 NOTA: Esta entrada está redactada desde el año pasado (2016), pero lo publico este año (2017) porque no había "editado" las fotos. Este año he roto la tradición y no he cosido nada con tela blanca de Cal Joan, porque iban con vaqueros (o pantalones negros, pero le puse vaqueros, que ya tenía), camisa blanca y sombrero cordobés. Descarté coser la camisa porque, siendo realistas, no la iba a usar nunca, y si le coso una camisa será para que la use, con telas molonas (y tengo la tela más molona del mundo mundial esperando que le meta tijera desde hace ya tiempo)
Enlazo en Menuda Inspiración y en el blog de fans de ottobre.



sábado, 23 de diciembre de 2017

Calcetín de los Duendes

En casa celebramos la Navidad de un modo diferente pero típico (ays... que bien me explico). Por ejemplo: hacemos calendario de Adviento pero no el típico de chuches o chocolates, y lo llamamos Calendario de los Duendes, ya que son dos duendes los que ponen las actividades cada noche para que las veamos al día siguiente.
La idea de la sorpresa, de la ilusión al ver los papeles me encanta, soy muy fan de este tipo de calendarios. De hecho, este año yo he hecho tres calendarios: el de mi guerrero y mi princesa (que me está encantando), el de Farbenmix (que es mi segundo año y no podría gustarme más la experiencia) y el de los Duendes, al que dedico este post.
Hace tres años hice un panel para el Calendario de Adviento, y lo he ido usando hasta este año.
Este año he preferido hacer el "calcetín de los duendes" con los restos de tela del panel. Cada día, desde el 1 al 24 de diciembre, mi mayor se acerca al calcetín y saca un papel que encuentra en él: allí tiene una actividad para realizar en familia. 

 El calcetín lo hemos puesto en la entrada de casa, donde tenemos el Rincón de la Estación (estamos en otoño, así que tiene el hada de Otoño, hojas que recogimos en la convivencia del cole y fotos de ese día. Ah! y por supuesto, Rapunzel y un cuento sobre el otoño... Ahora la mesa tiene también un árbol de Navidad)
De momento es el año que más me está gustando hacer el calendario, aunque a veces dejamos la actividad para otro día (ayer tocaba hacer magdalenas y lo hemos dejado para mañana) o la dilatamos en el tiempo (hemos estado varios días haciendo postales de navidad y decoración para el árbol).
Mañana es el último día: la despedida de los duendes, y por la noche, un libro (tradición familiar: regalamos un libro o algo de papel, que yo hasta este año que me he pasado al planner siempre he tenido mi moleskine)

Si tenéis alguna duda sobre como celebramos la Navidad, como enfocamos los Reyes Magos o  Papá Noel sin mentirles pero sin quitarles la ilusión, preguntadme, aunque hay mil post en otros blogs donde hablan del tema.

miércoles, 20 de diciembre de 2017

¿Qué llevo en el bolso?

Este es el segundo año que me atrevo a coser a ciegas el Calendario de Adviento que organiza Farbenmix, y es que acompañadas todo es más fácil. Aunque era a ciegas, se sabía que era una bolsa para la playa; en mi caso, eso me daba igual, porque pensaba usarlo para diario (el del año pasado no he dejado de usarlo, me va perfecto para llevarlo todo) y elegí un panamá que me enamoró al verlo (la idea eran unos pantalones para mi mayor, pero a saber si me quedará tela para cosérselos).
Cuando iba cosiendo el bolso lo veía pequeño, dudaba seriamente de que dentro cupieran las cosas que llevo a diario:
- pañal de tela en una wet bag (o dos, depende) para U.
- Tuper con algo de comer para U.
- Una o dos botellas de agua
- Toallitas (o desechables de toda la vida o un neceser con toallitas de tela)
- Pañales desechables (1 o 2) para A.
- Muda de ropa para U.
- Calcetines (no están en la foto)
- Minicuentos para amenizar las esperas
- Una gasita o muselina
- Neceser "hakuna matata" con las llaves, el móvil, el monedero, carnets...


 Me encanta el bolso, seguí las indicaciones sin apenas modificar nada, aunque el asa la hice de la misma tela y le puse un cierre de mochila. ¿Por qué? No sé... porque soy muy de medidas fijas, pero en invierno la necesito más larga que en verano (por el exceso de capas de ropa).
Por delante... si hubiera un premio a la solapa menos decorada, sería para mí: sólo le he puesto una plaquita "handmade" amarilla, pero es que me daba muchísima pena tapar los unicornios.
 Por detrás: vaquero reciclado y apliques de la misma tela.
 Y ahora por dentro.
En un lado, un bolsillo dividido con una costura (habría que haberle puesto un snap, pero sé que no lo voy a usar) y un trozo de cinta con un mosquetón, para las llaves (el del año pasado me resultó súper útil).

 En el otro lado, tira de elástico para llevar una botella de agua, idea de Xominaitas. Ahora no acabará la botella en el fondo del bolso, perdida entre pañales e inaccesible. (creo que este elástico se va a convertir en un básico en mis bolsos a partir de ahora)

´Pues va a ser que sí, que me cabe todo dentro del bolso XD
Ahora ya sólo me queda usarlo y sacarlo a la playa... digo, a la calle, porque este bolso para la playa no lo veo (bueno, para ir a pasear, o a tomar algo, sí, para eso va perfecto)
 Me encanta mi bolso nuevo, estoy enamorada de esos unicornios y deseando estrenarlo mañana mismo.
Para cerrar usé dos cierres de imán, pero no sé qué he hecho con la foto, que no la encuentro.
Y como es Mimiércoles, enlazo en Mimi de las Malas Costureras, que ya va por su semana 12.


lunes, 18 de diciembre de 2017

Baby escolar Totoro

Hace tres años compré el patrón de bata escolar a Naii, porque me encantó el corte japonés. Me imaginaba a R. llevando al cole un baby cosido por mi y me encantaba la idea. Por si acaso, compré el baby reglamentario del cole (¿y si no le dejan llevar otro? ¿y si tiene que ser azul? ¿y si...? mira que pensé "ysis", pero en ningún momento pensé ¿y si no me da tiempo a coserlo?
Como podéis suponer, R. fue en tres años con su baby azul, en cuatro años con su baby azul... y en cinco años me planté y subí a coserle un baby, que por lo menos terminase infantil con un baby escolar hecho por mami (realmente ya tiene uno hecho por mi, naranja y sin mangas, que os enseñé el año pasado, y que es su baby de verano, pero yo quería uno para todo el curso).
Fue él quien eligió la tela (y yo que me alegré, porque mira que es una tela bonita).
Manos a la obra...
Por detrás: un baby escolar de cuadros verdes y canesú.
Por delante: ¿a que mola?

R. está encantado con su baby (tiene mochila a juego,pero no le he sacado -todavía- ninguna foto... a ver si lo hiciera, que mucho enseñaros mochilas pero la de mi hijo no os la enseño, jeje).
Enlazo en Menuda Inspiración

sábado, 16 de diciembre de 2017

Muñeco de nieve con vasos

Seguramente cuando esta entrada se publique ya no tengamos ni el muñeco de nieve, pero es que soy lo peor!! Hice las fotos en el 2015, en Navidad, ya que fue una actividad del "calendario de los duendes": hacer un muñeco de nieve con vasos. Las metí en una carpeta dentro del ordenador y he ido redactando otras entradas y olvidándome del pobre muñeco, hasta que hoy, por fin, me he puesto a ello.
(no digo cuando escribo esto, pero es una entrada programada, a ver si esta Navidad os animáis alguna a hacer un muñeco de nieve con vasos, que es súper fácil)
Hay muchos tutoriales de cómo se hace, así que no os pondré uno más, pero sí quiero enseñaros un paso a paso del proceso.

Por la mañana, mi peque encontró una nota con un muñeco de nieve dibujado, y en el sofá (ponemos el calendario de los duendes encima del sofá) una bolsa llena de vasos de plástico, con goma eva rosa de purpurina y una grapadora. 
Le expliqué cómo había pensado hacerlo, le pareció bien y esa mañana nos pusimos a ello. Lo primero, hacer la parte de abajo, con mucho cuidado de que no se hiciera daño con la grapadora (cuando se cansó, seguí yo, y luego él, y luego yo... había vasos para ir turnándonos)
Aquí las dos bolas hechas. Lo más complicado para nosotros fueron los últimos vasos, los de arriba, que son los que le dan la forma redondeada al muñeco de nieve.
No sólo hicimos el muñeco, también tuvimos tiempo de jugar un rato.
Por cierto, conjunto handmade XD

La verdad es que pasamos una mañana entretenida, con muchas risas y pasándolo muy bien.
Y aquí nuestro muñeco de nieve terminado. Gorro y botones con goma eva llena de purpurina de color rosa (los duendes del adviento acertaron en el color XD), ojos con goma eva negra y nariz con un trozo de cartulina naranja.
Espero que os guste, y si nunca habéis hecho uno, os animéis a hacerlo (paciencia y a usar muuuuuchos vasos, esto no es nada bueno para el medio ambiente, pero lo "menos malo" es que lo tenemos ya tres años con este y sigue en buen estado. Cuando acaba la Navidad lo meto en una bolsa de basura y lo guardo, libre de polvo, hasta el año que viene)

miércoles, 13 de diciembre de 2017

Falda velvet

Esta debería ser una entrada larga y con  muchas fotos, porque la tela se lo merece (bueno, la tela y la costura, que estoy súper orgullosa de esta falda) pero no encuentro las fotos que hice "ex profeso" para el blog, así que tiro de fotos de boda XD
Hace dos o tres años vi por Facebook un vídeo de una falda llamada "falda velvet", no recuerdo ahora de quien era el vídeo, pero me encantó la falda, me enamoré mucho, y decidí hacérmela a pesar de mis pocas nociones de costura (como faldas, había cosido una Siri -¿alguien sabe de qué hablo? sí, ¿verdad?- y poco más). En Cal Joan encontré la tela, casualidades de la vida, y la compré.
No seguí mucho el tutorial, porque empecé a seguirlo pero pronto vi que esa falda con tablas no iba bien con mi cuerpo, así que hice pliegues menos marcados. Realmente quedó muy sencilla pero muy aparente. En la cintura empleé el lema que usaba cuando cosía para mis muñecas: "si algo queda mal, ponle un lazo".
La falda cierra con cremallera invisible y un lazo tapando el cierre (tengo pendiente deshacer esa costura y poner puño blanco, liso y menos abultado, pero de momento sigue así, me gusta el efecto del lazo).
Me la hice para una boda.
Un año más tarde tuve otra boda, y decidí volver a ponérmela, pero esta vez con la bandolera a juego. Compré "lino" (que de lino no tenía nada, pero de los errores se aprende) y me hice una bandolera, decorando la cola con la tela. Ya que iba a pasarme la boda -era tipo cocktail,de pie- con A. porteado,por lo menos íbamos a juego, ¿no?

Hace poco tuvimos otra boda (esto...poco... en agosto) y pensé completar el look con unos zapatos a juego. Tenía unas esparteñas a medio coser, de la segunda boda (la de la bandolera), pero en vez de terminarlas, compré unas ya hechas y forré la parte de atrás.
Al final para esa boda me puse un vestido negro, liso y comprado (ya os enseñaré las fotos de mis hijos, que ellos sí iban con camisas hechas por mami).
En noviembre tuvimos otra boda, a mediodía, y esta vez sí me puse el conjunto completo: falda, bandolera y zapatos.

Enlazo en Mimi de las Malas costureras

lunes, 11 de diciembre de 2017

Medusas en gris

Empiezo por el final XD pero por lo menos lo enseño el mismo mes que lo he cosido, jeje.
Pronto os enseñaré dos conjuntos: uno precioso para un bebé Recién Nacido, y otro, con las mismas telas, para U. 
Me gustó tanto el patrón de la camiseta que cosí otra más, con la tela de medusas que compré pensando en él (¿bebé y medusas? sí, a veces tengo combinaciones raras en la cabeza, pero para mí era una opción perfecta para un bebé chiquitín) y seguramente coseré más, aunque más adelante (ahora lo que necesita U. son sudaderas, a ver si me pongo pronto a ello).
Mangas en la misma tela pero distinto color, y FOE negro en cuello, puños y bajo de la camiseta (esto no lo tiene el patrón, pero me gustó la idea de que le quedase menos desbocado)


Enlazo en Blog de Fans de Ottobre y Menuda Inspiración

domingo, 10 de diciembre de 2017

¿Mi lactancia fue fácil?

Estaba a medio redactar el inicio de la lactancia con mi hijo mayor, pero lo he borrado. Contar los partos no me ha costado (bueno, sí, pero tenía muchas ganas de hacerlo) pero esto... llevo queriendo escribirlo mucho tiempo pero no acabo de arrancar.
Mi hijo mayor nació de 38 semanas tras una cesárea, y tuvo la mala suerte de encontrarse con una madre primeriza (aunque cabezona) y unas abuelas criadas en la cultura del biberón, aunque con muy buenas intenciones y ganas de ayudar, que para algo fue el primer nieto.
Como estuve tres días ingresada para la inducción, aproveché cada segundo para dejar clara mi postura: A quien le diera un biberón a mi hijo, lo denunciaba, y me daba igual que fuera una abuela o una enfermera. Yo iba a dar teta, y estaba dispuesta a todo para conseguirlo (si algo tengo que agradecer a mi matrona es que, pese a su escasa formación en lactancia, me descubrió a Carlos González y la posibilidad de dar teta, ya que yo no tenía ni idea de nada, y cuando era pequeña daba el biberón a mis muñecas).
En el hospital tardaron dos horas en dármelo, así que esa primera hora sagrada de la que hablan, y que dicen que es tan importante para el inicio de la lactancia, nos la perdimos. Cuando me lo dieron lo puse en el pecho, se metió el pezón en la boca y se quedó durmiendo. 
Así estuvo toda esa primera noche, encima de mi pecho, pero sin mamar. Las enfermeras entraban cada dos horas para controlarle el azúcar (pesó 4 kilos) y metían mi pezón en su boca. Chupaba un poco y a dormir. Yo no me preocupé, porque también quería dormir.
La segunda noche en el hospital mi hijo lloraba, y lloraba, y lloraba... no se enganchaba y yo estaba tan dolorida y tan incómoda que no sabía que hacer. Las enfermeras entraban, me preguntaban como iba y metían mi pezón en su boca. No les reprocho nada, al contrario: consiguieron que mi hijo mamase aunque el método no fuera el más adecuado. Esa segunda noche tuve que lidiar con los primeros comentarios de "eso con un biberón se soluciona" por parte de la abuela de la criatura. Pero ese biberón no llegó. Pasamos una noche mala, pero por fortuna pasó.
Cuando nos dieron el alta, me alertaron sobre la bajada de peso de mi bebé: nació con 4010 y había perdido 400 gramos: el 10% que se considera normal.
 
En casa las cosas no mejoraron. Nada más llegar, mi peque tenía hambre, y me lo enganché. Como no había forma de que se enganchase, intenté la postura de rugby, y ahí empezaron los comentarios:
- ¿Cómo le vas a dar teta así?
- Déjalo, si no tienes pezones (tengo pezones planos, pero los tengo, jeje)
Con toda la buena voluntad del mundo, e intentando imitar a las enfermeras, una de las abuelas (había tres en total) cogió mi pezón y lo intentó meter en la boca del bebé. Ahí ya sí que no hubo manera... él lloraba, yo estaba nerviosa, el padre de la criatura intentaba ayudar sin saber cómo... y los comentarios aumentaban.
- ¿No ves como no puedes? Si no tienes pezón.
- Eso con un biberón se le pasa, que tú eres muy cabezona y el crío está pasando hambre.
- Lo estás matando de hambre.
De lo que pasó después no estoy orgullosa, pero bueno... las mandé callar, les dije que si ese era su modo de ayudarme, se fueran de mi casa (las mandé a la m., realmente), que mi hijo iba a tomar teta y que me dejaran tranquila.
Se fueron y nos dejaron solos, pero no hubo manera. Ni rugby, ni posturas normales, ni tumbada en la cama... 
A las tres de la mañana yo tenía una ingurgitación que hacía que el pezón estuviese plano y el bebé no pudiera engancharse a él. Él lloraba, yo lloraba, y ni su padre ni yo sabíamos que hacer, así que llamé a mi madre para decirle que nos íbamos a urgencias, a ver si allí alguien podía ayudarme a que mi hijo se enganchara. 
Mi madre se presentó en mi casa con lo que le dije que comprase: un sacaleches, una jeringuilla y pezoneras. No quería usar pezoneras, porque la matrona había dicho que eran lo peor, que interferían en la lactancia y que no debíamos usarlas, pero me las puse y fue instantáneo: se enganchó a la pezonera y empezó a mamar. 

A los pocos días tuve la revisión con la matrona, y cuando me preguntó por la lactancia le dije que íbamos con pezoneras pero que bien, y ahí me dijo otra de sus perlas:
- Las que son como tú dan teta dos semanas y luego ya lo dejan.
En fin...
A los tres meses conseguí quitarme las pezoneras y luego seguimos 29 maravillosos meses, hasta que se destetó en el embarazo de su hermano, al cual a día de hoy le sigo dando teta (32 meses), una teta que comparte con su hermano de 7 meses. 
Sigo sin saber a que se refería mi matrona con lo de "las que son como yo", pero bueno XD
Al inicio de la lactancia de mi hijo mayor lo pasé mal, pero en todo momento conté con el apoyo de mi marido, y eso me ayudó muchísimo. Cuando me preguntan por mis apoyos a la hora de dar teta siempre digo que él fue mi apoyo incondicional (esa primera noche en casa le dije que igual todos tenían razón y el bebé necesitaba un biberón, y él me dijo que no, que yo podía y que no me preocupase ni pensase en dar biberón). En aquel momento no había grupo de lactancia en mi pueblo, y tampoco fui a otro hasta que no tuvo mi hijo casi un año. No tenía una tribu en la que apoyarme, y él fue mi apoyo. Más adelante, buscando como quitar las pezoneras, descubrí las tribus virtuales, el grupo de lactancia Madre a Madre (que entonces era Lactando), la existencia de las asesoras de lactancia... 
En ningún momento quiero decir que la teta sea mejor que el biberón, ni nada por el estilo. No pretendo culpabilizar a nadie, sólo contar mi experiencia. Cuando la gente me ve dar teta me suelen decir que lo hago porque he tenido suerte, y yo creo que no, que lo que hice fue creer en mí misma y ser cabezona, y buscar apoyo y ayuda cuando lo necesité (mastitis, perlas, ingurgitaciones, frenillos... son cosas que pasan pero con ayuda se superan).
Espero no molestar a nadie con esta entrada, en serio, no es esa mi intención.
De la lactancia de mis otros dos hijos no tengo mucho que contar: ambos se engancharon semi-bien en el hospital, y muy bien en casa, a pesar del frenillo de mi mediano (bueno, los tres tienen, pero sólo me ha dolido el suyo), así que creo que esta va a ser la última entrada personal en muuuuucho tiempo, ya volvemos a las manualidades y la costura. 

miércoles, 6 de diciembre de 2017

Neceser de ¿patchwork? Mimi #10

Esto del patchwork no es lo mío, pero por intentarlo que no sea.
Con retales de loneta sueca, un neceser cosido a mano a ratitos de tele (de esas veces que quieres coser pero no puedes porque la máquina está arriba y tus hijos duermen abajo
Por dentro lleva forro, y hasta la cremallera la he cosido a mano (menos mal que no hay foto de cerca, jeje). Lo importante es que cumple su función: se pueden meter cosas dentro, y me sirvió para quitarme de encima unos pocos restos de tela.
Enlazo en la semana número 10 de Mimi de las Malas Costureras.

lunes, 4 de diciembre de 2017

Entre gnomos anda el juego... otra vez

Hace tres años cosí para R. un peto de gnomos, con una tela preciosa: aquí lo publiqué.
Tres años después, lo ha heredado A., y mirad que bien le queda:
 Aunque es con tela plana y no con camiseta, resulta cómodo y le da libertad de movimiento (le valdrá todavía un año más)
 Y aquí por detrás, que acabo de darme cuenta de que la foto se ve algo borrosa.
Estas fotos son del verano, pero ahora mismo todavía lo lleva, con una camiseta debajo.
Enlazo en Menuda Inspiración,

sábado, 2 de diciembre de 2017

Regalando mochilas

¿Cuántas mochilas he cosido ya? Creo que, junto con las pizarras enrollables, son mi regalo preferido para hacer, porque aparte de ser bonitas, son muy prácticas. ¿Qué niño no necesita una mochila? En nuestro caso particular, más de una y más de dos, porque o se pierde entre los juguetes de la habitación, o está lavándose, o la tenemos con cosas para el parque y la necesitamos para el cole...
Por eso cuando fue el cumple de P., decidí coserle una mochila, con temática de Cars, película que vimos hace relativamente poco (lo que significa que es entre ayer y hace seis meses... ese es mi concepto de "hace poco")
Esta no es la última mochila que os enseñaré por aquí, ni por supuesto la última que coseré XD

lunes, 27 de noviembre de 2017

Arreglando rotos

Cuando os conté que yo no celebraba Halloween os conté que, junto a la camiseta de murciélago, había cosido unos leggins negros para completar el conjunto.
Costura rápida, express, que duró poco intacta, ya que jugando,esa misma tarde, el peque se cayó y los rompió un poco (o un mucho, que vaya boquetes se hizo el pobre).

Para solucionar el problema: mis primeras rodilleras.
Como supongo que ya sabréis, (y sino, su camiseta seguro que os da una pista) a R. le gustan los Pokemons, así que... rodilleras de dos Pokemons y roto arreglado. He conseguido aprovechar los leggins y pasar de unos pantalones negros básicos a unos más de su estilo y de su gusto.

Enlazo en Menuda Inspiración y, por supuesto, en blog de Fans de Ottobre.

miércoles, 22 de noviembre de 2017

MiMi: Tuneando un bolso

Hace un par de años me puse a ¿vender? cosmética (¿me hice asesora de belleza? juas juas) pero duré menos de un año, estaba claro que no era lo mío.
De esa etapa me quedaron algunas cremas (pocas, afortunadamente), maquillaje (demasiado, sobre todo teniendo en cuenta que apenas me maquino) y dos bolsos. 
Uno de ellos, tamaño folio, era perfecto para meter las cosas de fieltro del Quiet Book (seguimos con el grupo de costura, pero no quiero que el fieltro y sus complementos inunden mi casa, así que les he prohibido salir del bolso, jeje).
Aquí el bolso antes del tuneo: básico, negro (con pespuntes en rosa, muy chic él) y sosito, para qué negarlo.
 Casualmente, esa misma mañana había comprado en un multiprecio unas imágenes de Gorjuss que pensaba que eran pegatinas. Al llegar a casa y ponerme a usarlas vi que no eran pegatinas, sino transfers, así que... plancha y al bolso.
Por un lado, las cuadradas, tapando el logo de la marca de cosmética en el lateral.
 Por el otro lado, las imágenes redondas, a cual más bonitas (a estas alturas del blog ya sabréis que me encantan las Gorjuss en particular, y las muñecas en general)

Y con este bolso vuelvo a aparecer en MiMi, de las malas costureras. (Para el próximo, si mi over colabora, os enseño una camiseta)

lunes, 20 de noviembre de 2017

Pantalones free motion

Domingo por la noche. Minucasa, peques durmiendo.
El Minumarido se me acerca y me dice "Minu (bueno, él me llama H., jeje) R. no tiene pantalones largos en el cajón, deberíamos ver si en la ropa para guardar hay algunos para mañana". (Sí, hay veces que no llevo las coladas al día... lavo, lavo, lavo... pero no siempre puedo guardar el mismo día)
- Dame una hora -le dije.
Minumarido me miró como diciendo ¿en serio? porque ya me conoce, son muchos años juntos.
Una hora después, pantalones nuevos para R., que estrena pantalones y talla, la 122 (sí, mi peque ya ha dejado definitivamente de ser mi peque).

Pantalones muy cómodos y muy originales. Por arriba cagados,  las piernas pitillo y una falsa botonera a la que le puse unos botones color mostaza. 
Cuando los vio al día siguiente le encantaron, y a mi más al ver que había acertado con la talla. 

Y para aprovechar al máximo la tela: una cinta para el pelo, a juego con los pantalones, porque esta tela de Cal Joan está tan chula que no quiero desperdiciar ni un cachito (me queda muy poca, creo que me dará para el puño de unos pantalones de sus hermanos, o algo para las muñecas.... Llevo fatal aprovechar retales de camiseta)


domingo, 19 de noviembre de 2017

Quiet Book #2 Conteo

Aquí os traigo la segunda página de nuestro Quiet Book. 
La primera página, y la explicación, os la enseñé aquí
Antes del tutorial, quiero pedir perdón por la mala calidad de las fotos, pero es que terminé esta página (la empecé con las demás, cuando nos juntamos el jueves) en casa, de noche, viendo Walking Dead.
Materiales para el pulpo de conteo (que al final no ha sido pulpo, sino medusa):
- Dos colores de fieltro (una para la hoja del QB y otra para el cuerpo del pulpo-medusa)
- Cola de ratón
- Cuentas para realizar el conteo. Yo he utilizado cuentas tipo Hama Beads 
- Aguja, hilo, tijeras, dedal quien lo use... (por cierto, ¿coséis con o sin dedal? yo sin, soy incapaz de usar dedal)

Paso 1:
Se dibuja la silueta del pulpo/medusa en fieltro (yo lo copié de E., que lo dibujó a mano alzada). Se le borda la boca y con hilo a contraste (en mi caso, blanco) de bordea toda la figura. Iba a ponerle ojos móviles, pegados, por eso no los cosí en este paso. Si preferís usar ojos cosidos (con botones, por ejemplo) éste sería el momento de coserlos. Yo cambié de idea tarde.

Paso 2:
 Se cortan tiras de cola de ratón (en mi caso, 10. Si hacéis un pulpo, serían 8) y se cosen un poco más arriba de la mitad del folio de fieltro.

Paso 3:
Se cose el pulpo/medusa a la hoja de fieltro, tan centrado como queramos. Se cose todo el contorno menos la parte de abajo, donde van los tentáculos. 

 Paso 4:
Metemos las cuentas por la cola de ratón, en orden creciente: una cuenta, dos cuentas, tres cuentas... y se hace un nudito debajo. Cortamos el sobrante.
En mi caso, le puse dos botones a modo de ojos, porque quería terminar el pulpo antes de que acabase la serie que estaba viendo y no me apetecía subir y ponerme a buscar los ojos móviles (a saber a quien hubieran matado en mi ausencia)

 Paso 5:
Terminamos. En mi caso, le he puesto una plaquita "handmade" en madera amarilla, a contraste. Me gustaría ponerle como burbujitas por arriba, pero estoy indecisa. Por un lado, creo que quedaría súper mono, pero por otro lado, creo que cuantas menos cosas tenga la página, mejor, porque así los peques se centran en el juego de contar y no se distraen... Ya veré que hago (acepto consejos y opiniones)

Y esta es mi segunda página del Quiet Book. Como podréis ver, no soy una experta en el fieltro, ni en los tutoriales, pero si puedo ayudar a alguien, aquí estoy.
¿Alguien se anima a hacer un Quiet Book para sus peques o para regalar?